Para nadie es un secreto que conducir bajo los efectos del alcohol es peligroso y está penado por la ley. Aun así, son pocos los conductores que son conscientes de los riesgos que corren al conducir tras haber ingerido alcohol. El consumo previo de alcohol está presente en un alto porcentaje de los accidentes de tráfico.
Con el objetivo de mejorar la seguridad vial se realizan pruebas de alcoholemia mediante unos dispositivos especializados, etilómetro y alcoholímetro.
¿Qué es un alcoholímetro o etilómetro?
Aunque estos dispositivos tienen funciones similares no son lo mismo. Veamos de qué se trata cada uno.
¿Qué es un alcoholímetro?
Si alguna vez te han parado en un control de alcoholemia habrás observado que los agentes realizan una primera comprobación sin necesidad de que el conductor salga del vehículo. Ese primer control lo realizan con un alcoholímetro, un aparato pequeño con pantalla digital que indica el resultado de la prueba. Se trata de un aparato que no expide ningún ticket con el resultado, su función es descartar la conducción bajo los efectos del alcohol.
¿Qué es un etilómetro?
En caso de que el resultado supere los límites legales permitidos el conductor deberá realizar dos pruebas más, esta vez en un etilómetro, el cual tiene una mayor precisión y emite un ticket con el resultado de la prueba, tiempo y volumen soplado, fecha, hora. Dicho documento es el que servirá como prueba en el futuro juicio en caso de que la tasa de alcoholemia supere el límite de 0,60 miligramos por litro de aire expirado fijado en el artículo 379.2 del Código Penal.
Como ya comentamos en otra entrada, la negativa injustificada a realizar cualquiera de las tres pruebas es constitutivo de un delito de negativa a someterse a las pruebas de detección alcohólica del artículo 383 CP.
Modo de empleo
Ambos dispositivos requieren que la persona evaluada sople por medio de un tubo o boquilla desechables para obtener el grado de concentración de alcohol en sangre.
La diferencia entre ellos radica en que mientras el alcoholímetro es llevado hasta el vehículo donde está la persona para realizar la prueba, con el etilómetro, la persona será acompañada hasta el lugar donde se ubique el aparato. Este, generalmente, se encuentra en un maletín en el vehículo de los agentes de tráfico y puede imprimir un comprobante.
Validez legal del alcoholímetro y el etilómetro
Antes hablamos de las diferencias que existen entre ambos dispositivos, sin embargo, la más importante es su validez legal. En la legislación de nuestro país está estipulado que para la presentación de una denuncia se necesita la prueba de un etilómetro o una prueba de sangre.
Por lo general, el ticket expedido por el etilómetro es lo que se tiene en cuenta como documento probatorio en un juicio rápido por delitos contra la seguridad vial, el etilómetro emite un comprobante que refleja todos los datos recogidos por el agente policial, como el nombre del conductor, lugar, fecha, hora y, por supuesto, la tasa de alcohol en aire expirado.
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